Nuestros pies son una de las partes del cuerpo que más puede sufrir, incluso llevando un estilo de vida sedentaria. ¿Cuántas personas hay que trabajan sentadas en una silla pero llevan un calzado poco apropiado que les causa molestias?

Escoger el calzado adecuado siempre es importante, pero cuando tenemos pies delicados se vuelve una necesidad. Si quieres saber cómo combatir los problemas y las molestias que causan los pies anchos o planos, los juanetes o los llamados pies diabéticos, en este artículo te contamos cómo hacerlo gracias a los zapatos ortopédicos, los únicos que abogan por el confort y la comodidad de los pies más delicados.

1. Cómo combatir los problemas de pies anchos

Tener los pies y los tobillos anchos es un problema que va mucho más allá de lo estético. Por tanto, si tienes este problema no se trata de buscar unos zapatos altos y cubiertos que lo disimulen, sino un calzado que no te oprima, que no te cause heridas y permita que la circulación de la sangre cumpla su función sin causar hinchazones ni molestias.

Los zapatos más adecuados para los pies planos o anchos son aquellos que cuentan con palas elásticas en los laterales. Las palas elásticas de los zapatos ortopédicos son tejidos que combinan piel natural con fibra elástica que permite que el calzado se amolde al pie y no al contrario.

2. Cómo combatir los juanetes y los dedos en garra

Cuando el dedo gordo descansa sobre el segundo dedo, se produce una  desviación del mismo que forma un bulto en el lado externo del pie, que tiende a inflamarse y a causar dolor. Si esta deformación no se corrige a tiempo, puede causar otras deformaciones en el resto de dedos.

La aparición de juanetes y dedos de garra tiene un origen genético, debido también en ocasiones a lo que se conoce como “pie egipcio”, pero también viene provocada por usar calzado inadecuado, por la edad o como consecuencia de padecer otros problemas relacionados, entre los que se encuentran los pies planos.

En esta situación, encontrar un calzado cómodo puede ser una tarea complicada. Lo más importante es que no sean estrechos en la zona de los dedos. Los zapatos ortopédicos protegen esta zona y ayudan a corregir los juanetes para que los pies adopten de nuevo poco a poco su forma natural.

3. Cómo combatir los pies diabéticos

La diabetes actúa sobre todo el organismo y los pies no son una excepción. Los niveles demasiado altos de azúcar en sangre pueden dañar los nervios y hacer perder sensibilidad en los pies, lo que quiere decir que pueden producirse cortes, ampollas o llagas sin que seamos conscientes de ello. Si no tratamos estas dolencias en su fase inicial, estas lesiones pueden transformarse en úlceras y causar infecciones que serán mucho más dolorosas y difíciles de tratar.

La cara interna de los zapatos ortopédicos para diabéticos carece de costuras, lo que evita que la más mínima rozadura pueda causar heridas en la piel. Por otro lado, la parte externa también presenta un refuerzo especial que protege los pies de agresiones externas, como golpes o la acción de la humedad.

Finalmente, los zapatos ortopédicos no solamente están indicados para los 3 casos que tratamos en este artículo, sino para cualquier persona que busque un calzado adecuado, muy cómodo y que no cause ningún tipo de dolor.